Profesionales y encargados de diversas áreas clave fueron cesados de sus funciones en la Comisión Nacional de Búsqueda.
La implementación de medidas de austeridad republicana ha afectado significativamente a la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), que experimentó una reducción de más de 5 millones y medio de pesos en su nómina solo durante el mes de enero en comparación con diciembre. Este ajuste se debe a los drásticos recortes de personal llevados a cabo.
De acuerdo con una lista de la nómina de la comisión obtenida por MILENIO, dicho organismo cerró el 2023 con 219 servidores públicos, quienes en conjunto percibían un sueldo bruto de 7 millones 831 mil 595 pesos.
Sin embargo, luego de despedir, no recontratar u orillar a renunciar a 193 funcionarios, en enero sólo se les pagó a 26 trabajadores, quienes representan un gasto salarial de 2 millones 211 mil 75 pesos.
De esta manera, la Comisión Nacional de Búsqueda, que encabeza Teresa Guadalupe Reyes Sahagún, adelgazó su nómina para el 2024 en 5 millones 620 mil 520 pesos, es decir, el 71 por ciento de la cifra con la que cerró el año anterior.
Entre los funcionarios que fueron despedidos se encuentran la directora de acciones de búsqueda, de vinculación con organizaciones, de recursos humanos y de gestión y procesamiento de información.
Otras áreas que ya no cuentan con directores son las de investigación y registro forense en las regiones norte, sur, centro y oeste; además de otras como vinculación región sur, análisis de contexto y de asuntos jurídicos.
Además de las direcciones de diferentes áreas, también han sido despedidos servidores públicos adscritos a departamentos como recolección de muestras para la identificación humana, análisis de genética y registro de información genética.
Así como de las sub-direcciones de registro de datos de identificación humana, de acciones de búsqueda y enlace, análisis genético, entre otras áreas.
En lo que va del año, la CNB ha despedido expertos en materias como antropología, arqueología y genética, así como personal médico, dactiloscópico, forense, de psicología y de trabajo social, al igual que expertos en temas jurídicos y de relaciones internacionales.
Sin estos trabajadores, se obstruyen los procesos de búsquedas con enfoque masivo forense, análisis de contexto, guerra sucia, búsqueda generalizada en libros de panteones y búsqueda de migrantes, entre otros.
Al personal que realiza búsquedas en campo se les prometió un contrato trimestral de febrero a abril, pues madres buscadoras le exigieron a la comisionada Reyes Sahagún su recontratación, pero hasta la fecha esa promesa no se ha cumplido.
MILENIO publicó en enero pasado que, con menos de año y medio de uso, el edificio del Centro Nacional de Identificación Humana perteneciente a la Comisión Nacional de Búsqueda, fue desalojado y más del 60 por ciento del personal fue despedido.
Fuente: Telediario.
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