Tras la reciente alerta emitida por la UNAM sobre el riesgo inminente de un resurgimiento de casos, diversas entidades han instado a sus habitantes a completar el esquema de vacunación como medida preventiva.
En una reciente alerta emitida por el Programa Universitario de Investigación sobre Riesgos Epidemiológicos y Emergentes (PUIREE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), se advirtió a la población mexicana sobre el riesgo inminente de un resurgimiento de casos de sarampión y rubéola en el país. Ante esta situación, diversas entidades han instado a sus habitantes a completar el esquema de vacunación como medida preventiva.
El PUIREE de la UNAM, a través de un comunicado a principios del mes de febrero, instó a la ciudadanía a permanecer en alerta ante la posible aparición de casos sospechosos o confirmados de sarampión y rubéola.
Para combatir estas enfermedades, el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia (CeNSIA) destaca la importancia de las vacunas triple viral (SRP) y doble viral (SR), que funcionan contra el sarampión, la rubéola y la parotiditis.
La vacuna contra el sarampión se administra mediante una inyección en el brazo izquierdo y requiere de dos dosis para brindar protección efectiva.
La primera dosis se aplica a los 12 meses de edad, mientras que la segunda se administra a los seis años o al ingresar a la escuela primaria; es crucial destacar que los niños son especialmente vulnerables durante los primeros cuatro meses del año, pero los adultos también pueden beneficiarse de la vacunación, excluyendo a las mujeres embarazadas.
La mejor protección contra el sarampión para los niños, es la vacuna triple viral SRP (que protege contra sarampión, rubéola y parotiditis); para adolescentes y adultos, la doble viral SR (sarampión y rubéola), según el Programa Universal de Vacunación del Instituto Mexicano Del Seguro Social (IMSS).
Para facilitar el acceso a la vacuna, el Instituto Mexicano Del Seguro Social ha dispuesto la aplicación de la vacuna contra el sarampión, la cual se puede aplicar de forma gratuita en todas sus clínicas a lo largo del país y la única documentación necesaria es:
Presentar la cartilla de vacunación de la persona que recibirá la dosis.
No tener ninguna enfermedad infecciosa en curso.
No estar embarazada.
No haber recibido la vacuna contra el sarampión en los últimos 30 días.
Ante la amenaza latente de estos virus contagiosos, las autoridades sanitarias hacen un llamado a la población para que, en un esfuerzo conjunto, se sumen a la campaña de vacunación y contribuyan a prevenir la propagación de estas enfermedades; la salud de todos está en juego, y esto se presenta como la herramienta más efectiva para enfrentar una posible emergencia epidemiológica.
Fuente: Publimetro.
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